Todo este proceso de apertura de derechos, beneficios, tiene un plazo en conjunto de alrededor de 6 meses a 1 año, o incluso más.
Cuando un solicitante de asilo obtiene el reconocimiento de su estatus de refugiado o de protección subsidiaria (Beneficiarios de la Protección Internacional) este se enfrenta a procesos aún más engorrosos que la misma solicitud. Servicios públicos que no reconocen su estatus, solicitud de pasaporte o solicitud de visa. Todo este proceso de apertura de derechos, beneficios, y finalmente el insertarse en la sociedad tiene un plazo en conjunto de alrededor de 6 meses a 1 año, o incluso más.
El proceso de inserción comienza con la regularización de los BPI a través de la obtención de un certificado de prolongación de estadía, el cual permite la apertura de los derechos sociales. Esta etapa es crucial y la más compleja para ellos y para los asistentes sociales, ya que se ven enfrentados a los plazos que muchas veces son demasiados. Para recibir ayuda financiera, toma entre 3 semanas y un mes y medio, periodo en el cual los BPI no pueden trabajar para sustentarse.
Paralelamente a esto, los BPI tienen clases de idioma todos los días, a los cuales su asistencia es obligatoria por ende solo dependen del poco ingreso monetario que el Estado les provee, lo cual corresponde a un tercio del salario mínimo bruto. Además, hay que agregar que muchos de ellos deben abandonar sus antiguos alojamientos, ya sea porque el Estado los requiere para alojar otros solicitantes de asilo, o porque deben enfrentar medidas de expulsión. Por ende, el buscar alojamiento también es primordial, situación que solo se logra después de 6-9 meses de acompañamiento. Si bien, la mayoría pide quedarse en las grandes ciudades, por la comodidad, y por sus comunidades de la misma nacionalidad, hay que ser claro que el quedarse en la ciudad es demasiado costoso para ellos, por ende, se les incentiva a ir a vivir a las pequeñas comunidades en el campo, donde muchas veces logran obtener una mejor calidad de vida, colegio para sus hijos, trabajo, e incluso conocer a las autoridades comunales. Finalmente, una vez que los BPI logran encontrar algún trabajo que les permita ser autosuficientes, y que hayan aprendido a ser completamente autónomos en su vida diaria, su inserción en la sociedad se encuentra completa.
Todo lo relatado sucede en Francia, escenario que podríamos aprender para implementar políticas públicas y mejorarlas de acorde a los tiempos actuales.
ANDRÉS COO CAUSA
Master Estudios Migratorios Université Côte d’Azur
Programa de Estudios Europeos UdeC