Mejora de pensiones no es un tema ideológico
Pocos asuntos han sido más vergonzosamente tramitados que la denominada Reforma Previsional cuyo propósito declarado y ampliamente compartido es mejorar las pensiones de los actuales jubilados. Vergüenza que viene del tiempo de tramitación y del marcado ideologismo con que se le aborda.
Cabe tener presente que el significativo aumento de la expectativa de vida de los chilenos hace que la mejora de las pensiones requiera, al menos, del incremento de la tasa de cotización y simultáneamente hacerse cargo y compensar la menor rentabilidad esperada de los ahorros. En sus respectivos momentos, las comisiones previsionales Bravo y Marcel establecieron la necesidad de aumentar la tasa de ahorro o cotización.
Elemento central del problema lo constituye el destino de los 6 puntos de cotización adicional propuestos. El gobierno quiere llevar 4 puntos a un fondo de reparto para que los actuales cotizantes ayuden a mejorar las pensiones de los jubilados yendo los 2 restantes a las cuentas individuales. La oposición y la ciudadanía (70% según encuestas recientes) quieren que la cotización adicional vaya íntegramente a cuentas individuales.
En días recientes la Fundación Pivotes ha presentado un estudio de su investigadora Elisa Cabezón demostrando en resumen, que la expectativa de vida de los chilenos se incrementa un año por década y que para compensarla en las pensiones de sus actuales trabajadores junto con el menor retorno de los ahorros (rentabilidades decrecientes), de los seis puntos de cotización adicional al menos 4,6 deben ir a cuentas individuales para mantenerlas equivalentes con las de hoy. Esto significa que no habría mejora y que entonces un 77% de los seis puntos adicionales ya estarían comprometidos. Respecto del 1,4 puntos restantes cabe imaginar que los chilenos aprendieron y han dramáticamente comprobado que el Estado no es un buen administrador de recursos, que malgasta y muchas veces opta por el clientelismo político y no por el interés general.
En este contexto la Gira Mejores Pensiones para Chile de la Ministra del Trabajo parece más bien un mero acto de proselitismo político que no busca aportar elementos o antecedentes para mejores reflexiones respecto de un tema complejo y tan ideologizado como la mejora de las pensiones.